Yo también quiero cacerolear

Che, estaba pensando algo para el próximo cacerolazo... Estaría bueno juntar a un grupo de compañeros, disfrazarnos todos de chetos indignados (chombas Lacoste, camperas Columbia, anteojos Ray Ban y caras de orto), armarnos de utensilios de cocina, mezclarnos entre los manifestantes, y una vez allí, hacer alguna boludez. Tiro un par de ideas:

- Un par sacan un par de armas de fuego, empiezan a tirar tiros al aire, y todos nos largamos a gritar "¡Revolución! ¡Revolución!". Luego, cuando empiecen a sonar las sirenas de la ley, nos escabullimos disimuladamente, mientras llega la policía a reprimir y a llevarse a los caceroleros posta.

- Estar todos ahí, meta queja, meta pataleo, meta quiero mis dólares, hasta que uno diga "che... estuve pensándolo bien... la verdad, no se que hago acá. no me falta nada, estoy lleno de plata, la vida me sonríe... yo me voy", y acto seguido, el resto de los compañeros empieza a coincidir: "¡tiene razón el señor! ¡yo también me retiro!", "¡sí, es cierto! yo me las tomo de acá!", "permiso, yo también me voy... tengo unas películas en Blu-Ray que ver en mi plasma de 40 pulgadas", etc. Capaz que alguno recapacita.

- En vez de caer al cacerolazo disfrazados de chetos, caer todos disfrazados de militantes del MST (que es básicamente lo mismo, claro). Nos ponemos remeras del MST, llevamos pancartas del MST, nos ponemos a repartir panfletos que contengan argumentos recontra-re-mil retorcidos que relacionen los cacerolazos con la revolución socialista (se puede, se los dice alguien que ha leído "Alternativa Socialista" más de una vez), armamos un puesto de venta de libros (con textos de Marx, Lenin, el Che, Rosa Luxemburgo, Vilma Ripoll y demases), cantamos "La Internacional" a los gritos, y nos ponemos a bajarle línea ultra-troska a los concurrentes. La idea es aburrirlos hasta que les dé un derrame cerebral, o que salgan corriendo horrorizados, o qué se yo.

- O sino, caer todos disfrazados de travestis escandalosos y convertir al cacerolazo en una marcha por el orgullo LGBT. Música tecno a las recontra chapas, tipos besándose con tipos, minas besándose con minas, y todos llenos de maquillaje y plumas sacándonos fotos abrazados con las viejas paquetas. Haría falta un camión con un buen sonido, eso sí.

- Llegar en una camioneta llena de choripanes y cajas de vino, bajarnos y empezar a repartir vales entre los concurrentes, mientras se le dice a cada uno "aquí tiene doñita/don/pibe/etc, con este vale pase a retirar por la chata el chori y el vino que se le prometió, no se agolpen que hay pa' todos". Luego de esto, que uno se dirija a todos y les diga: "¡Che, acuerdensén de que en dos horas tenemos que estar en los bondis que nos van a estar esperando acá enfrente nomás, en la plaza Velez Sarsfield, eh! ¡No se me vaya a perder ninguno que después tengo quilombo con sus punteros!".

Bueno, es lo que se me ocurre por ahora. Tiren ustedes alguna.